A GUARDA

Castro Galaico - Romano

A Guarda se localiza en el Monte de Santa Tecla en la desembocadura del Río Miño antes de su desembocadura con el Atlántico. A Guarda era paso de la Vía Per Loca Marítima que llegaba hasta Braga.
El castro se descubrió en 1913 con la apertura de la carretera de subida al monte, aunque hallazgos anteriores ya confirmaban la existencia de un poblado. Los restos hallados se han datado entre el año 27 a.e.c. y 14. El yacimiento ocupa una extensión de 700 metros de largo por 300 de ancho. Predominan las construcciones circulares algunas con vestíbulo aunque también hay construcciones ovales y cuadradas, estas ultimas debidas al influjo romano.   

Se han hallado restos pertenecientes a celtas y romanos; los restos de las casas, cerámica, ánforas, monedas romanas, fíbulas y torques celtas, anzuelos, espadas, esvásticas, estatuillas e ídolos; además de los petroglifos, como el mapa de piedra.
En las casas estaban integrados el almacén, las cuadras, etc, era una vivienda-hogar. Podría estar enlucida tanto interior como exteriormente. El pavimento era de tierra pisada, enlosado o en la misma roca viva. Ocupaba el centro de la vivienda el fogón y en las paredes se colocaban repisas y colgadores de decoración sencilla.
En el muro exterior se colocaba la esvástica. La cubierta era generalmente vegetal. El diámetro de estas viviendas oscila desde los 2m, hasta los 5,6m. Y el grosor de los muros desde los 33cm. hasta los 60cm.